En estos 24 días de acampada hemos aprendido a canalizar nuestra indignación para convertirla en acciones efectivas: mediante las asambleas y los debates hemos sido capaces de poner nuestras ideas en común y tomar decisiones importantes a través del consenso. De las asambleas han salido grupos de trabajo encaminados a buscar alternativas a los medios habituales de consumo, producción y educación. Hemos aprendido a organizarnos, a ser autosuficientes y a solucionar nuestros problemas diarios.
A nivel estatal hemos constituido unos acuerdos comunes y la coordinación necesaria para conquistarlos: exigimos la reforma de la ley electoral, la total transparencia política, intolerancia a la corrupción, eliminación de los privilegios de la clase política y crear una democracia verdaderamente participativa.
El camino para obtenerlos discurrirá como hasta ahora de forma cívica y pacifica. Condenamos el comportamiento antidemocrático que han tenido los funcionarios de los cuerpos de seguridad en Madrid, Barcelona, Valencia, Santiago de Compostela y Salamanca recordándonos las épocas mas grises que vivió la generación de nuestros padres. Sin embargo, agradecemos el respeto que han mostrado por estos mismos cuerpos en Soria.
Ahora dejamos la herramienta de la acampada a un lado para adoptar otras formas de lucha que hagan el movimiento 15 M mas fuerte y dinámico.
DEJAMOS CLARO QUE VINIMOS CUANDO QUISIMOS, NOS VAMOS CUANDO QUEREMOS, Y VOLVEREMOS CUANDO LO CREAMOS NECESARIO.
Dejamos la plaza para tomar las calles, esto solo es el principio.
ABANDONAR LAS PLAZAS EN LAS CIUDADES GRANDES PARA TOMAR LOS BARRIOS... TIENE SENTIDO, PERO ABANDONAR LAS PLAZAS EN LAS CIUDADES PEQUEÑAS Y EN LOS PUEBLOS, NO TIENE NINGÚN SENTIDO ESTRATÉGICO, SÓLO SUPONE UN DEBILITAMIENTO DEL MOVIMIENTO, UN SÍNTOMA DE QUE NUESTRA SITUACIÓN NO ES TAN DESESPERADA O NUESTRA CONCIENCIA NO ES LO SUFICIENTEMENTE FUERTE, ES UNA VUELTA A LAS FORMAS CONOCIDAS DE LUCHA (SÓLO QUE AHORA SE HAN UNIDO COLECTIVOS DIVERSOS, E INCLUSO OPUESTOS EN ALGUNOS ASPECTOS, EN ELLA) QUE SABEMOS A DONDE NOS LLEVAN....
ResponderEliminarESTÁ DEJANDO DE SER UN MOVIMIENTO POPULAR... LO QUE HACE IMPOSIBLE LA CREACIÓN DE COMUNIDAD ASAMBLEARIA POPULAR, QUE ERA LO MÁS INTERESANTE.
¡RECUPEREMOS LA CALLE PARA TOD@S, NO SÓLO PARA L@S ACTIVISTAS!¡NO USURPEMOS EL ESPACIO DEL PUEBLO, ACAPARÁNDOLO CON NUESTROS MODELOS EXCLUYENTES!
Los cuerpos represores del Estado no reprimen cuando no hay nada que ponga en peligro a este. Si no han intervenido en Soria no es porque la policía de aquí esté formada por buen@s chic@s demócratas y respetuosos de las libertades, sino porque nosotr@s no lo hemos sido tanto; ya que si lo fuesemos llevaríamos nuestra lucha hasta sus últimas consecuencias (con una actitud no violenta, se sobreentiende).
ResponderEliminarCuando nos autorreprimimos, la policía no necesita intervenir. Se lo ponemos fácil.
Creo que desde la Jefatura de Policía están pensando en condecorarnos como lucha ejemplar, seguro que al acto nos dejan llevar nuestras pancartas y todo.
Definición de civismo: (Del fr. civisme). 1. m. Celo por las instituciones e intereses de la patria./ 2. m. Comportamiento respetuoso del ciudadano con las normas de convivencia pública. [Extraído del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, vigésima segunda edición]
ResponderEliminar¡Cuidado con el civismo!
Además, el respeto a las normas de convivencia pública supone un planteamiento bastante ambigüo. La represión en nombre del civismo puede ser un caballo de batalla contra el que debamos luchar de ahora en adelante.
¿Cómo mantener un comportamiento cívico (desde la segunda acepción) cuando este supone pura hipocresía y ocultación de la realidad injusta que viven amplios sectores de la población, en una sociedad opresora?